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Los telescopios de ESO enfrentan con éxito la peor tormenta en una década
14 de Julio de 2011
Durante un período de cinco días que comenzó el 4 de julio de 2011, la parte norte de Chile, incluyendo el desierto de Atacama en Chile – conocido como uno de los lugares más áridos de la Tierra - fue alcanzado por uno de los frentes de mal tiempo más intensos que han azotado a la región en más de 10 años. El Observatorio Paranal de ESO se vio afectado por el paso de esta extremadamente inusual tormenta, pero los procedimientos de seguridad implementados en el lugar dieron muy buenos resultados. Nadie resultó afectado y no hubo daños a los telescopios. Sólo se registraron daños menores en la infraestructura del lugar, lo que demuestra que todas las instalaciones de Paranal están bien preparadas para las adversas condiciones climáticas que se pueden presentar en esta alta montaña, situada en el desierto de Atacama.
Este frente de mal tiempo fue el peor experimentado por el observatorio desde el inicio de sus operaciones en 1998. Se alcanzaron niveles muy altos de humedad, fuertes vientos de más de 30 metros/segundo, enormes cantidades de polvo, lluvia torrencial y temperaturas bajo cero.
La Residencia de Paranal se vio especialmente afectada por la fuerte lluvia, con algunas inundaciones localizadas. Afortunadamente, las oportunas precauciones permitieron evitar cualquier daño. Pese a la escasa lluvia que cae en Paranal, los telescopios e instrumentos cuentan con cubiertas especiales que los protegen de cualquier posible daño.
Andreas Kaufer, director del observatorio, informa que "tres noches de observación se perdieron debido a las malas condiciones meteorológicas. Esta fue una pérdida de tiempo de observación inusual, pero estábamos preparados para tales eventos que ocurren escasamente durante los períodos de invierno. A pesar de este clima inusual, esperamos alrededor de 340 noches despejadas al año en Paranal. Hoy, el sitio ha sido limpiado y los daños menores a la infraestructura ya están reparados en su mayoría".
El Observatorio La Silla, situado a unos 500 km al sur de Paranal, no se vio afectado por estas condiciones de mal tiempo.
El Llano de Chajnantor, a 5,000 metros de altura, donde se encuentran los telescopios APEX y ALMA, también han debido enfrentar nevadas inusualmente intensas y tormentas de lluvia. No se han reportado daños en APEX. En ALMA, los sistemas del observatorio están siendo revisados y si bien hasta ahora no se han reportado daños, la acumulación de nieve ha causado algunas dificultades.
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