11 de Noviembre de 2015
En muchos lugares de la Tierra hemos dado un gran suspiro de alivio después de que pasara la parte del año que da más miedo (Halloween). Pero el Universo tiene un último susto reservado para nosotros, ¡una estrella zombie real!
Esto no es solo un disfraz, la estrella del centro de la imagen ha resucitado de la muerte realmente… y está hambrienta.
Cuando las estrellas como nuestro Sol queman todo su combustible, alcanzan el final de sus vidas. Desde fuera sabemos que ha ocurrido esto cuando vemos que la estrella empieza a hincharse alcanzando varias veces su tamaño inicial, tornándose más y más roja mientras crece.
Al final llega a ser demasiado grande y las capas externas escapan al espacio, alejándose flotando hacia el vacío.
El núcleo caliente y muy compacto de la estrella es todo lo que queda. Lo llamamos enana blanca (por su color y tamaño, ¡por supuesto!).
¿Pero qué ocurre con los planetas que están alrededor de la estrella, pueden sobrevivir a esta prueba de fuego? Si lo hacen, ¿que quedaría de ellos?
Bueno, por primera vez los astrónomos han podido observar lo que ocurre cuando las cosas que dan vueltas alrededor de una estrella enana blanca se acercan demasiado. Y no fue bonito.
Descubrieron que un asteroide había deambulado peligrosamente cerca de esta estrella muerta y había acabado accidentalmente como cena de la estrella.
El disco de material que vemos alrededor de la estrella no muerta está hecho de los restos destrozados del asteroide. La parte buena es que el disco, parecido a los de Saturno, es muy bello. ¿Quizás el asteroide lo habría preferido así?
Dato curioso
Esta estrella nos está dando algunas pistas importantes acerca del destino de nuestro propio Sistema Solar. Menos mal que lo hemos averiguado por adelantado, ¡siete mil millones de años deberían de ser suficiente para planear una escapada!